Recuerdo haber escuchado por primera vez el “Soda Stereo” de Soda Stereo en enero o febrero de 1986 en el vinilo que mi primo César trajo de Lima. Si bien no podré decir que fue amor a primer oido, si me gustó ese sonido fresco que despercudía la FM de aquellos años y que luego serviría de caldo de cultivo para la invasión de las mas diversas bandas argentinas, españolas y chilenas que se pusieron de moda iniciando la segunda mitad de la década de los 80's.
Al segundo disco de Soda, “Nada Personal”, si le presté mucha mas atención. Lo escuché (en cassette) de lado a lado sin descanso, descubriendo programaciones, teclados y artilugios hechos en la post producción con letras en castellano que tambien me sirvieron para averiguar sobre bandas que, en sus entrevistas, los miembros de SS tomaban como sus referentes, tanto estilísticas como en sus influencias y en sus gustos musicales; fue asi que me puse a escuchar discos viejos de The Cure, lo que se podia encontrar de Gang of Four, canciones sueltas de Echo & The Bunnymen y bandas como Simple Minds o Tears For Fears para descubrir que, mas allá de lo que nuestra siempre miope FM nos ponía, había un mundo de opciones musicales interesantísimas por buscar.
En la época de su tercer disco, “Signos” yo ya tenía grabado de Radio Panamericana su concierto en el coliseo Amauta y me lamentaba de no poder haber ido a escuchar a los que ya consideraba mis héroes musicales y, con los amigos de siempre, escuchábamos y reescuchábamos este artefacto de encriptadas letras que sonaba impecable y que nos servia como pretexto de soñar en formar una banda que nunca fue, una banda formada en nuestro imaginario sin saber tocar bien ningun instrumento y que, por supuesto buscaría tener ESE sonido.
En el Perú sonaba TRAMA la "copy/paste band" que emulaba el sonido "Sódico" y que logró tener muchos seguidores mientras mis amigos y yo buscabamos todos los discos de U2, redescubriamos a Queen, entendiamos mas a Culture Club, nos maravillabamos con los trabajos de David Bowie, nos intrigaba los instrumentos y la forma de composición de Kraftwerk, nos alegraba oir a The Smiths, imaginabamos estar en un concierto de New Order y soñabamos con los instrumentos de Depeche Mode.
En el 88 encontré el disco más cool de Soda, un disco de sonido ambicioso, grabado y mezclado en EE UU con la producción de Carlos Alomar y que nos presentaba el primer video clip de la banda: “En la ciuidad de la furia”. “Doble Vida” era, por donde se lo mire, un discazo; adornado con metales, con fugaces rapeos, sonidos newyorkinos y muy actual para el momento. Lo escuché en el vinilo que se compró un amigo como regalo de cumpleaños y nos pegamos a escucharlo esa misma tarde, la previa para dar la bienvenida a 1989.
En la década de los 90´s nos presentaron: “Cancion Animal”, disco de canciones básicas, rockeras, hechas a la vieja usanza, grabadas en una sola toma y con un gran espíritu rockero para luego cacheterarnos con su versión mas sónica: “Dynamo” , disco con experimentos sonoros y capas de sonido que nos mostró el lado mas visceral de la banda y que se encargó de sentar a los seudo fans a los que les pareció demasiado. “Sueño Stereo” se encargó de completar la impecable discografía de una banda que evolucionó frente a nuestros oidos y que siempre sorprendió por estar a la vanguardia de lo que significaba la música por este lado del planeta y que, como en mi caso, me hicieron buscar, leer y disfrutar de otras bandas, otros géneros, otros idiomas y por ellos hasta hoy sigo buscando ESE ALGO que tiene cierta música que es capaz de (seguir) sorprendiéndonos.
Busquen la discografía de Soda Stereo y disfrutenla. Tal vez los anime a buscar otras bandas, otros géneros y sirva como pretexto para ampliar su horizonte musical.
Fuerza Gustavo!!!